24/04/2009
¡NO AFLOJE, NÉSTOR ¡
Por Héctor Ricardo Olivera
La especulación electoral que determinó el adelantamiento de las elecciones ha puesto en marcha un proceso que suma a las tensiones propias de urnas y padrones, acuerdos y desacuerdos, listas y toda la parafernalia natural, el hecho de aumentar el campo de la imprevisibilidad y el asombro.
Tanto es el dopaje alucinógeno, que hoy por hoy hasta crecen rumores que sugieren que la candidatura del “no ex” presidente Kichner en el primer lugar de la boleta del Frente para la Victoria en la Provincia de Buenos Aires podría evanescerse.
Y no porque la Ley Electoral no se lo permita, porque todos saben que su domicilio está en la calle Maipú 225 de Río Gallegos, su lugar de Nacimiento, razón por la que no hay magia sensata capaz de hacer de un pingüino un ñandú.
Esta irregularidad, mal que nos pese, se ha transformado en hábito y son muchos y variopintos los que nacieron acá pero después son candidatos de allá y/o viceversa.
En verdad, la incertidumbre parece sentar bases en las encuestas que inundan los jardines de Olivos y no muestran los números deseados.
Aunque suene contradictorio, porque lo malo no debería ser el instrumento para lo bueno, sería saludable para transparentar la situación y hacer que cada uno se haga responsable de sus actos que el “no ex” presidente sea el candidato estrella de la lista de Diputados Nacionales del FPV en la Provincia de Buenos Aires.
El ya cercano 28 de junio nos pondrá entonces ante la circunstancia inigualable de decir lo que pensamos, imaginar lo que queremos y votar en consecuencia.
Como para empezar a entibiar el DNI bien puede hacerse un repaso rápido de los perfiles del “modelo” vigente.
El modelo se favoreció con las condiciones excepcionales de la economía mundial durante sus primeros años, con una demanda creciente de nuestra producción primaria y precios inimaginables.
Creció la economía, lógicamente, pero al final del ciclo creció la pobreza, ilógicamente.
El encarnizado enfrentamiento con el campo ha roto la cadena productiva por lo que en pocos años asistiremos a la triste experiencia de tener que importar carne para la parrillada de los domingos, (los que puedan).
Las Instituciones son, para Kirchner, un escollo al que hay que evitar.
El diálogo, indispensable en cualquier sociedad democrática es una práctica innecesaria y un gesto de debilidad.
Por eso esta semana, como si lo hubieran lastimado aguas vivas, contestó en Mar de Ajó a los dirigentes rurales con la acusación de que “son hijos de Martínez de Hoz y de Cavallo”.
Le ocurre lo que a todos los conversos.
Por necesidad deben ser exagerados.
En tiempos de Martínez de Hoz el Dr. Kirchner no firmó un solo habeas corpus ni militó en organización alguna de defensa de los Derechos Humanos.
Era la hora del retiro patagónico para hacer fortuna fácil con los negocios inmobiliarios facilitados por la dictadura.
En tiempos de Cavallo el Presidente era el Dr. Carlos Saúl Menem, de quien el Dr. Kirchner dijo que era “el mejor Presidente que jamás había tenido la Argentina.
El “modelo” lo necesita candidato.
La Provincia de Buenos Aires lo necesita candidato.
La Argentina lo necesita candidato.
Que sea, junto con los “testimoniales”, para que podamos elegir lo que queramos y lo que no.
El único requisito será el respeto irrestricto por las reglas del juego.
Puede sonar irreverente, pero más vale anticiparse para no llorar luego sobre la leche derramada.
Si oficialismo y oposición garantizan los controles, la gente sabrá asegurar el futuro …