Desde la web radical señalan además que han caido preocupantemente las habilitaciones comerciales. Los mayores costos que hoy comparativamente tiene Gesell conrespecto a Municipios como Pinamar han expulsado a inversores.
La estrepitosa caida de la recaudación durante el año – más de seis millones menos de lo presupuestado, según el propio estimado para el 2010 – habla a las claras del fracaso de un modelo opresivo, que cargó las tintas sobre el comercio, motor de la económia de la Ciudad.
Mientras el mostrador de la Municipalidad muestra la preocupante caida de las nuevas habilitaciones, el Municipio responde con mayor presión al sector Comercial, entregando a una empresa privada por ocho años el monopolio del cobro de la Tasa de Publicidad; una tasa con exclusivo impacto comercial. En una muestra más del desconocimiento del ritmo económico de la ciudad, impone nuevas condiciones, privatizando “toda deuda por tasas mayor de 90 días”.
En este berretín de barbaridades, se suman la entrega por tercera temporada de la Playa, desobedeciendo a la propia Justicia y generando responsabilidades económicas a futuro para el Municipio.
En el medio quedarán aprobados contratos ocultos y que hoy pasarán a la legalidad, ocultos detrás del mismo manto de sospechas que los tuvieron ocultos hasta hoy.
Desde el radicalismo vemos como el Intendente Municipal ha sumado en el Concejo deliberante no a Concejales Críticos y que piensen en Gesell, sino cómplices de su propio accionar.
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