La playa vuelve a estar en un marco de inseguridad para los inversores, habida cuenta del recambio del gobierno que se viene este año, que obligará a una revisión de lo que la propia oposición ahora denuncia como raves irregularidades en el proceso. La falta de publicación de los boletines oficiales puede ser uno de los aspectos que agravan el cuadro de situación.
El proceso judicial en curso, la legislación que no se ha tenido en cuenta - como el propio decreto 3202, que prohibe el cemento en playa y establece como principio rector al establecido en la norma IRAM 42100 - más el código de playas no derogado en su totalidad, hacen juridicamente inviable el proceso votado.
Un dato a tener en cuenta es la gran depreciación de los valores de las concesiones en playa. Ofertas que hace cuatro años atrás se hicieron por más de cine mil pesos de canon, esta vez se redujeron a la mitad: una evidencia palpable de que el valor de recupero para el negocio ya no es es el msimo.
La discusión en el recinto fue una artillería de argumentos con poco sustento muy mucho de propio interés, criticando lo que el otro hizo; pero sind ecir nada acrca de las sucesias prorrogas que erneta otorgó a trece concesiones, vencidas en el año 2007, como tampoco la prorroga de una unidad, expresamente vedada por la Ordenanza 2050.
La playa vuelve a ser una historia con final abierto.
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