2. Congela los guisos en porciones que sirvan para una comida, según el número de miembros de la familia.
3. Sazona con prudencia, ya que los sabores se acentúan con el tiempo. Siempre podrás rectificar cuando vayas a recalentar.
4. La duración de platos cocinados con grasa animal, ya sea manteca o cualquier otra, se acorta considerablemente. Será mejor sustituirlo por aceite.
5. Un plazo prudencial para los platos que llevan carne o pescado es de dos meses. Los guisos de verdura y los caldos pueden durar hasta 6 meses. 6. Las empanadas se conservan mejor si se congelan crudas para hornearlas en el momento, directamente del congelador. No obstante el relleno deberá estar cocido de antemano.
7. Las papas se conservan mal, evita ponerla en los guisos que vas a congelar.
8. Una forma sencilla de congelar guisos es dividirlo en porciones y colocar estas en recipientes individuales, para descongelar solo las que vas a consumir, otra es forrar una cacerola con papel aluminio, con cuidado de no romperlo y colocar en ella las porciones de guiso que queramos congelar. Dejar que se enfríe completamente, en la heladera, y luego pasarlo al freezer. Sacar el paquete de la cacerola pasándola por agua caliente y colocarlo en una bolsa para freezer con la correspondiente etiqueta. Para consumirlo solo habrá que desenvolverlo y colocarlo en la cacerola donde lo congelamos a fuego muy suave o en el horno.
9. Para descongelar platos que se van a servir fríos, simplemente dejarlos en la heladera hasta que tomen la temperatura optima.
Bon apetite y hasta la semana que viene.
Liliana Garegnani
SiGesellnoticias