Como corolario, si bien el medio no hace a la comunicación, no es posible la misma sin el medio pero que no otorga linealidad alguna.
Entonces, el gran desafío es llegar a la gente a través de lo que se informa y preguntamos ¿qué es lo que se informa?, he aquí la capacidad del comunicador, si está consciente del fenómeno dual de la noticia que muestra y oculta, necesite organizar un discurso lingüístico como visual, alejado de los términos de las noticias y construir un formato en términos de realidad,
El hiato que existe entre noticia y realidad, es lo que se debe superar y para ello, construir un discurso en términos de lo real, de lo contrario la noticia termine por ocultar y opacar esa realidad, pues lo real que se desconoce y no es aprehendido por lo lingüístico y lo visual, simplemente no acontezca como tal.
La hegemonía de la noticia siempre habrá de provocar su propia realidad, algo que el periodismo reconoce y ejerce.
Ahora, esta necesidad de superar a la noticia como fenómeno informativo no será tarea fácil si hemos de tener en cuenta los referentes de la condición mediática en este pueblo, hablamos de gente ejerciendo la función de periodistas con las siguientes características: que no repreguntan a quienes entrevistan, ni refractan lo impuesto como verdad, mantenerse serviles a las pautas económicas que los mantienen pero especialmente desde el punto ideológico se encuentren alienados por las noticias, así, en tales condiciones, el formato comunicativo que postula a lo real como su eje, será más que imposible, sin embargo, si se quiere comunicar si o si se lo debe estructurar.
Por ejemplo, el presente intendente Barrera y sus acciones de gobierno en el pueblo poseen un sesgo en particular, pues todo el contexto político y periodístico ha definido que sus acciones entre otras, buscan distanciarse lo más posible de su predecesor, ahora, ese sentido de fondo ¿llega al colectivo?, se piensa que sí según el formato mediático de la noticia, pero si se pregunta a quienes se hallan lejos de de ese reducido universo de políticos y periodistas, la respuesta no sería clara ni afirmativa, al vecino que no está interesado no le llegan tales cuestiones.
El formato de la noticia respecto a la información de las acciones políticas, hacen abstracción de intencionalidades y motivos como sentido integral hacia un modelo o proyecto local que envuelven tales acciones, pues ese es el sustrato mismo de lo real operando para que el hecho político sea, porque es desde ese operar intencional la fuente desde la cual se generan acciones, provocan sucesos, instalan eventos, se trata de eslabones de una agenda ejercida desde el gobierno local exigiendo una hermenéutica para entender el sentido de los plazos de las acciones del oficialismo, lo que él se quiere hacer y así, comunicar.
E insistimos, algo que los alienados por las noticias no puede ejercitar.
Como ejercicio final consideremos hipotéticamente la siguiente cuestión que suceda en el pueblo: se terminaron las casas, se hizo el materno infantil, se puso la red de gas en todo el partido, comisaría de la mujer, construcción de comisarías, nueva terminal, más cambios en el gabinete etc., todas son noticias, no obstante, ¿que comunican, que dejan trascender, que sugieren?
Estamos frente a una ambigüedad que no comunica y eso es la noticia, tal aspecto hace posible la siguiente lectura, que las noticias comuniquen sentidos contrarios a los que se desea informar y pueden ser leídas de la siguiente manera, “¡claro!, ¿cómo no va a hacer eso, si está ya haciendo campaña?”, o quizás, “¡siempre pensando para el partido!, la comunidad ¿cuándo será beneficiada?”, en el mismo tono, las fotos donde se ve al intendente en eventos, reuniones, encuentros, al no poseer una condición carismática, aparece siempre circunstancial y tal imagen, no redunde en su beneficio ese aparecer mediático, y eso es por la ambigüedad de la noticia.
Una cabal comunicación debe tener como eje a la realidad articulada en discurso, ciñendo las intencionalidades en términos de hechos y sucesos políticos y no de hechos ajenos a una agenda de gobierno, porque la noticia por ser ambigua siempre tergiversa, por lo tanto, si cualquier ciudadano del pueblo no nota la diferencia entre esta administración y la anterior, es porque algo falla en lo comunicativo, y según la premisa que se informa desde las noticias, si el gobierno cuenta con esa necesidad comunicativa, deberá romper el presente formato si quiere informar y significar su realidad, aquí en medios locales presos de sus premisas o si se quiere, de las noticias.
O en otras palabras…¡estáis en el horno!
Juan Oviedo
SiGesellnoticias