Como medida contraria nos topemos con un tipo de acción más activa, que se opone y posee los medios para que algo no suceda, interviene haciendo cosas concretas desactivando la acción ajena, por ejemplo, ante la amenaza de un aumento de precios, los que se encuentren en contra de eso, no lo permitan directamente, esa es una cabal oposición. ¿Cuáles son las formas, los resortes, el saber para tal poder y poder intervenir?, por el momento son una conjetura.
Lo que intentamos señalar es el valor cabal de un tipo de oposición según la primera concepción, que nos dice que ella como tal, no tiene poder ni posee los medios o los resortes para detener, cambiar formas o modelos de gobierno que van en contra de la gente que dice representar, por el cual será una oposición asistencialista y socorrer a las víctima de decisiones pero que ella, como oposición, no puede detener.
Es claro que el sentido de la conjetura de esa segunda oposición, que interviene y no permite que las decisiones de gobierno vayan en contra de intereses de la gente, nos lleve a preguntarnos por la capacidad operativa que posee toda oposición para desactivar lo que se hace en contra del provecho de las mayorías, y respondernos, ninguna.
Entonces, ¿cuál es la importancia de hecho que la oposición como tal se justifique a si misma?, su alimento político está en utilizar a su favor su propia inutilidad para cambiar el rumbo de las cosas, peros sustancialmente para que estas no sucedan, por esa incapacidad es que pone su agenda detrás de los hechos que todo oficialismo lleva a cabo, tal oposición desde el asistencialismo señalado y su vocación de futuro, posicione en el advenir del mañana, en la próxima elección, "su potencial poder hacer" cuando sea gobierno.
Usted mira a los programas en los que asiste esa oposición, con diagnóstico correcto o no, ve a políticos, economistas, sindicalistas, funcionarios, intendentes, militantes, todos en la misma senda, hablan, dicen, señalan correctamente, algo que usted como individuo experimenta en el diario espacio en el cual vive, víctima de la inflación, del aumento del dólar, de los precios, servicios, falta de trabajo, medidas equivocadas y cuanta cosa más, eso usted lo experimenta pero usted no puede hacer nada en contra del hecho brutal que el gobierno en ciernes le va imponiendo con su agenda, usted ya no es beneficiado sino castigado y no posee el poder para poner coto, límite a todo eso, mientras, la oposición que habla, señala y dice lo que usted vive,........ tampoco.
Tal oponerse, ¿instruye, edifica, configure entre sus manos la futura gestión a la que seguramente se opondrá? o solamente forme parte del folclor político que sostiene, "bueno hoy le toca a ustedes y mañana a nosotros", típico estructuralismo sujeto a lo cíclico por el cual nunca cambiará jamás nada, excepto, a no ser que se ponga en práctica esa palabra demonizada a la que llamamos "revolución", pero en este país lo más cercano a ella fue esa frase dicha hace muchos lustros atrás, "la vida por Perón", bueno, sabemos que fue mera frase.
Ahora, oponerse en serio aparte de no transigir debe llevar a lo revolucionario, y eso no es declarativo, ni asistencialismo alguno, ese no transigir no implica un manifestar en contra sino a no justificar la conflictiva violencia que usted sufre a diario ¿y sabe qué significa eso?, mire esto no es declarativo sino que debe actuar en el conflicto, él forma parte de su realidad y desde ahí, debe combatir, luchar, pero no debe hacerlo como carne de cañón y darse de alimento a los hambrientos aparatos represivos, sino usar el conflicto como medio para operar y para ello debe vivir, pensar, trabajar y respirar desde el conflicto y utilizarlo como herramienta de enfrentamiento a la que no se transige, porque la otra forma ya la conoce, la vienen haciendo desde hace varios lustros también, y con los mismos resultados, se llama oposición concertada, que organiza desde ahí, su ir detrás de los hechos.
No cabe dudas que tal oposición es parte de un proceso político que tiene por eje el pendular electoral, algo que hoy te pone como gobierno y mañana te saca de ahí, por eso seducir a aquel que te pone o te saca, que sos vos o usted, enrolado como lo que sea, te necesita y para ello, se posicione como oposición, ponerse alternativa al oficialismo que hoy reina, que fue votado, pero no se voto la presente agenda.
El sistema en este país hace de este pendular su razón de ser, pero sin cabal intransigencia porque estamos en un país que supo poner al "gringo", y a "doctores de grado" para llegar al estado, por ello el oponerse a toda derecha y aun al sistema neoliberal simplemente sea un "flatus vocis" más.
Juan Oviedo
SiGesellnoticias