Vamos a otro ejemplo -golpe de Estado-, he ahí un delito, usted no hizo o no hace nada al respecto, entonces, "es culpable". Claro se trata de algo político diciéndonos que: "el estado de derecho ha dejado de funcionar", entonces -el poder judicial-, al no actuar en contra de los golpistas, según sus normas instituyentes, son también culpable por omisión y presas de su propia condición.
Esa esfera "tan altamente regulada" por normas, artículos, etc., nos plantea -que las culpabilidades- son determinadas por acciones que no respetan valores "que deben estar presentes" en el actuar de las personas y por ello, cometer "el delito" desde la tesis de la omisión.
Entonces, afrontemos la siguiente -deductividad-, los valores como guía general, después, las particularidades pero, "qué sucede si esas singularidades" ¡nada saben de los valores que deben guiarlos!, ¿sería pertinente la culpa por omisión?
Usted pide ejemplos, "un peón", ¿actúa conforme en una economía que busca una autonomía nacional?, ¡no!, seguro que no, pero se halla bajo un gobierno que le dice "de la lucha por la liberación de la dependencia del país" -y ese peón-, solo trabaja para ganarse el sustento diario alejado de todas las peroratas oficiales, ¿es culpable de algo?
Le recuerdo una frase, YO ARGENTINO, ¡qué más omisión que eso!.................y un hecho, "el gol con la mano de Maradona", fenómeno viciado de nulidad y burlonamente llamado "la mano de Dios".
Pero quizás le cabe a la politización de la grieta y crear sus falsas cuestiones para tapar lo verdaderamente importante, que -no se trata de uno u otro bando-, sino que la grieta consista en "del decir del relato" y "de la realidad desnuda de él", esa sea ¡la cabal grieta que incluye a todos! "El relato" siempre hará referencia -al mundo de los valores-, como guía pero se trata de algo que "no posee realidad empírica" como sentido social. La sociedad es un término teórico y como tal, no es cosa empírica, al igual que las mamushkas rusas, el discurso se va estructurando entre sí, pero a la hora del contraste, solo hallamos términos, palabras, dichos concatenados pero -sin soporte empírico alguno-
¿Y esto que nos dice?, que usted -no vive- en un país sino en una casa, usted -no trabaja- por la patria sino por un sueldo, usted -no se viste- a la moda sino porque no debe andar desnudo, usted -no existe- para ser feliz sino para no ser infeliz, usted "no puede ver, tocar, sentir" sino solo creer desde su condición de crédulo lo que significa "país, patria, moda, felicidad", intangibles posicionados por los relatos, "que no son suyos" sino ahí impuestos por intereses, pero sí -ve y palpa- a la casa, -si transpira- el trabajo, -y aquello- con que se viste -y experimente - el dolor por estar infeliz.
O en otras palabras, culpable por tanta omisión.
Pero aquí lo más importante: "intentarán hacerlo sentir culpable" al posicionar consignas de tinte social que involucra -al todo- y ataquen el sentido subjetivo e individual desde el cual usted -ve y se mueve en el mundo-. No se trata que usted "piense distinto" sino que es más profundo que eso -hacerlo distinto- pues según el planteo parmenídeo que vincula -el pensar con ser- usted debe "dejar de ser lo que es", bajo una manera de pensar diferente y así, zanjar la culpabilidad por omisión.
En Filosofía "sino en quien", se examina desde la Ética, lo que "son" los valores a la luz de una corriente llamada "Metaética", y desde ahí, le sorprenda descubrir "la sarasa" que en definitiva, son los relatos a las que se incluyen la omisión.
Juan Oviedo
SiGesellnoticias