"Nosotros somos así" por ello el salto al "deber ser", es una consecuencia determinada por "ese es", nos referimos a la mediatizada definición del garche por parte de la mencionada candidata, por el cual si se garcha es parte de "un deber ser" antecedido por ese "ser peronista". La pregunta sería, ¿en qué consistiría ese "ser peronista" como preceder "del deber" e imperativo del garchar?.
"Una vacuidad" porque si la señora Tolosa Paz "viene a realizar" lo que aun -no es- y esto significa hacer posible felicidades y grande a la patria, es porque tales instancias y valores no existen fácticamente como tal, pues ¡no se desea lo que se tiene!, sino -lo que no se tiene-.
Ante la revuelta mediática, los medios oficialistas salieron a plantear la instancia del "derecho al goce", donde -el garche- sería la piedra angular de ese derecho, entonces, ¿ quienes sino los peronistas vienen ejerciendo ese derecho?, por el cual "el garche", no solo ha sido politizado sino fundamentalmente, es un connotado poseedor de un signo partidario, -¡el peronismo!- y cuando usted -tenga relaciones sexuales- ¡estará adhiriendo a valores peronistas! y aunque usted no lo quiera reconocer, ¡sus padres son peronista!.
La cuestión se va complejizando, ya no se trata de la guillotina de Hume sino que se pasa de un plano moral a otro ¡ontológico!, como implica que por un relato se sustancialice el predicado "peronista" y éste, pase a ser el elemento central de toda determinación posterior, así, la vida, el baile, el disfrute, el goce, el garche, el pueblo, la patria, el voto, es y será peronista, tal es lo que implica el hacer -una sustancia- al predicado, como los supo plantear Ludwig Feuerbach en "El origen de la religión", Dios como predicado del hombre, se lo sustancializa y termina creando al hombre.
Así, si analogizamos el planteo de Feuerbach con Perón, éste "ha creado el peronismo" pero "el peronismo" terminó por crear -al propio Perón- como principio generador, divinidad política y fundador de una época nueva etc., lo que queda a la vista es la importancia del pensamiento unívoco y su inquietud de fondo, ¡su masificar!, por el cual el pensar distinto sea su cruzada de fondo, colonizar las mentes -no peronistas-, porque "nosotros somos así", entonces, usted rápido de reflejos se dice, pero ¿y la democracia?, es parte del pensar univoco amigo mío, tal como se la concibe en este país.
Por ello, no debe sorprendernos "el sentido teleológico" del decir peronista, donde la felicidad, pueblo, patria etc. al quedar centrados en lo que ¡son!, posicionen "la falacia del deber" con el garche como trasfondo.
Juan Oviedo
SiGesellnoticias