Si bien el expediente D-14892/23 iniciado por el departamento Ejecutivo estaba destinado a ser tratado en Comisión, el concejal Martin Arguiñarena impulsó el tratamiento sobre tablas de la iniciativa, que extendió la emergencia por un año.
Desde Juntos el concejal Amadeo Montenegro fue muy critico con la propuesta, señaló que “se priorizaba proteger un negocio por sobre un servicio, y con la extensión de la emergencia hasta marzo se condena a Villa Gesell a padecer ds inviernos más con un servicio precario”.
Desde Juntos apuntaron al tratamiento que tuvo el pliego desde que fue aprobado el 6 de setiembre, hasta el día que se fijó la fecha de apertura de las ofertas: el 12 de diciembre. Además, con la sanción de la emergencia hasta el 27 de marzo en el camino, y hasta una interpretación del abogado del Municipio Jorge Viola, que concurrió en señalar que la nueva empresa debía empezar el servicio con posterioridad al 27 de marzo.
“Por encima de una ordenanza que venia a sanear la emergencia, el asesor legal entendió que era más importante la emergencia. Nadie comienza un emprendimiento en ningún lugar de la costa en abril, había que acelerar los tiempos y licitar antes de la temporada, la perdida de tiempo fue absolutamente deliberada”, señaló Montenegro.
El mismo expediente que tramitó el pliego de licitación, mas allá de lo breve, tuvo muestras de la verdadera intencionalidad de hacer poco atractiva la oferta: desde decretos llamando a licitación, cuya apertura se realizaría “en lugares a designar”, pasando por lo escaso de la publicidad dada a la licitación, la comunicación solo a dos empresas del rubro del proceso licitatorio, hasta el hecho de que la misma empresa que es beneficiaria de la prestación del servicio hoy fuertemente subsidiado por el Municipio no se presentara a la licitación.
La empresa Nuevo Bus viene recibiendo mensualmente un subsidio del Municipio de $ 2.560.000 por mes, además de haber sido premiada en los últimos seis meses con un aumento del boleto de más del 100%, muy por encima de la inflación. Paralelamente, la empresa Nuevo Bus se ocupó de hacer transfers a hoteles, y hasta el monopolio de los viajes al Faro Querandi.
“Si me demuestran que todas estas prebendas fueron para mejorar el servicio, les creo, pero no pasó así: la empresa todo el año pasado incumplió los primeros y los últimos servicios del día, no cumplió con el recorrido en los barrios, y mucho menos las frecuencias”, resumió Montenegro.
SiGesellnoticias